Selección Ecuatoriana

Era el próximo 10 de Ecuador, salió campeón en Europa, pero ya no encuentra equipo y se arrepiente

Era el futuro de Ecuador antes que Kendry Páez, pero sus malas decisiones lo llevaron a arrepentirse

Por Mateo Garzón

Jugadores de La Tri (Foto tomada de: Primicias/La Tri/Pinterest)

Johan Mina era el elegido para ser el próximo 10 de Ecuador, pero su decisión apresurada de irse a Europa lo afectó. Con solo 17 años ya era una de las joyas del país y pintaba para grandes cosas. Sin embargo, ahora ya no tiene club y con 22 años parece que se estancó, pues ni en su préstamo en Emelec tuvo oportunidad.

La historia de Johan Mina es un claro ejemplo de cómo las decisiones apresuradas pueden desviar una carrera futbolística prometedora. El joven ecuatoriano, que en su momento deslumbró con su talento y se perfilaba como el futuro "10" de la selección nacional, hoy se encuentra sin equipo, buscando una nueva oportunidad para retomar el camino que alguna vez parecía destinado al éxito.

El despegue meteórico y la decisión equivocada

Johan Mina irrumpió en el panorama futbolístico ecuatoriano con una calidad innegable. Sus actuaciones en las categorías juveniles de Emelec y, sobre todo, su destacada participación en el Sudamericano Sub-17 de 2019, donde fue goleador con seis tantos, lo catapultaron a la fama. Su habilidad, regate y visión de juego lo convirtieron en una de las grandes promesas del fútbol tricolor.

Este rápido ascenso atrajo la atención de clubes europeos, y en 2020, Mina tomó la decisión de fichar por el Werder Bremen de Alemania. Sin embargo, esta elección, que en principio parecía un paso adelante en su carrera, terminó siendo un punto de inflexión negativo.

El arrepentimiento confesado: "Me apuré en tomar decisiones"

El paso de Mina por el Werder Bremen no fue el esperado. El jugador no logró consolidarse en el primer equipo y fue relegado a las categorías inferiores. En 2019, en una entrevista con Diario Expreso, Mina confesó su arrepentimiento por haber tomado la decisión de irse tan pronto de Emelec.

"Me arrepiento de haberme ido de Emelec. Nada salió como esperaba. Las cosas me llegaron muy rápido y me apuré en tomar decisiones. En su momento, Nassib Neme (expresidente de Emelec) me recomendó que no me fuera, que primero gane ritmo en el país, pero no le hice caso. Al final tuvo razón", declaró Mina, reconociendo el error de no haber seguido el consejo del entonces presidente del club eléctrico.

Estas palabras reflejan la frustración de un joven que vio truncado su desarrollo por una decisión prematura. La falta de adaptación al fútbol alemán, las pocas oportunidades en el primer equipo y la lejanía de su entorno afectaron su rendimiento y su confianza.

Destellos de éxito en categorías inferiores europeas

A pesar de las dificultades, Mina tuvo algunos momentos positivos en Europa. Fue parte de los planteles del Werder Bremen II y del Estoril Sub-23, con los que logró ser campeón en ambas divisiones. Si bien estos títulos representan un logro en su palmarés, no fueron suficientes para impulsar su carrera al nivel que se esperaba.

El fantasma del "próximo 10" y el estancamiento

Johan Mina llegó a ser considerado el futuro "10" de la selección ecuatoriana. Su talento natural y sus actuaciones en las selecciones juveniles ilusionaban con la posibilidad de encontrar un nuevo referente en el mediocampo tricolor. Sin embargo, su estancamiento en Europa frenó su progresión y lo alejó de la órbita de la selección mayor.

El presente: Sin equipo y en busca de una nueva oportunidad

Actualmente, Johan Mina se encuentra sin equipo. Tras rescindir su contrato con el Werder Bremen, el jugador busca una nueva oportunidad para relanzar su carrera. A sus 22 años, aún tiene tiempo para recuperar el terreno perdido y demostrar el talento que lo llevó a ser considerado una de las grandes promesas del fútbol ecuatoriano.

Una lección aprendida y un futuro por escribir

La historia de Johan Mina sirve como una lección para muchos jóvenes futbolistas que se ven tentados por ofertas del extranjero a temprana edad. La importancia de una buena asesoría, la paciencia y la consolidación en el fútbol local antes de dar el salto a Europa son aspectos fundamentales para el desarrollo de una carrera exitosa.

A pesar de las dificultades, la historia de Mina aún no está escrita. Con trabajo, dedicación y una buena elección de su próximo destino, el talentoso mediocampista ecuatoriano podría volver a brillar y demostrar el potencial que lo llevó a ser considerado una de las grandes promesas del fútbol tricolor. El tiempo dirá si logra retomar el rumbo y alcanzar las expectativas que alguna vez generó.

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