Luis Macías alargaba las noches cuando jugaba en Barcelona SC y cuando ya nadie se acordaba de él consiguió equipo para este 2020

Luis Macías, conocido como el Cocacho, llegó en noviembre del 2009 al Barcelona SC contratado por el presidente de esa época, Eduardo Maruri. Su buen desempeño en Liga de Portoviejo hizo que varios equipos nacionales se interesaran por sus servicios, pero fueron los canarios los que adquirieron sus derechos deportivos.

Con 23 años vistió la mítica camiseta número 7, esperando emular al legendario Carlos Muñoz Martínez, pero nunca pudo despuntar solo jugó 6 encuentros y marcó un gol en esa temporada. Una década después de su paso por la escuadra torera confesó que su consumo de drogas, las farras y su fama por jugar en el Ídolo fueron claves para su declive futbolístico.

“En un partido Olmedo vs. Barcelona me tocó hacerme la prueba doping y no sabía qué hacer porque había consumido drogas. Entonces me tocó decirle a un juvenil, el marcador izquierdo apellido Espinoza, que me apoyara para hacer la trampa que muchos jugadores la hacen pero no se atreven a decir: ‘jugar con una funda con la orina de un compañero entre mis partes íntimas para luego asistir al control antidopaje’. Durante 15 minutos jugué y estaba preocupado”, reveló en una entrevista con Fútbol Sin Cassette.

Cuando ya se había perdido del radar del hincha y del fútbol ecuatoriano, ha regresado y le darán una nueva oportunidad en la Segunda Categoría, específicamente en Esmeraldas FC. El último registro de un club donde estuvo Macias fue en Malecón de Santa Ana (Segunda Categoría de Manabí) en la temporada 2018.