Tocó el cielo con las manos en LDU, pero el deporte por el que Jorge Fossati casi no llega al fútbol

Jorge Fossate, confesó: "A mí me apasiona el básquetbol, me apasionaba jugarlo, en aquel momento era alto, la altura de los jugadores de básquetbol ha crecido. Jugaba bastante bien para la época, fui seleccionado en mi país, de juveniles, a los 17 años me hicieron mi primer contrato en el fútbol y ahí tuve que dejar el básquetbol", esto en el programa de Memoria Redonda.

Jorge Fossati, el experimentado director técnico uruguayo que tocó el cielo con las manos al mando de Liga de Quito, conquistando la Copa Libertadores en 2008 y la Recopa Sudamericana en 2009, reveló una faceta poco conocida de su vida durante su participación en el programa "Memoria Redonda". El estratega confesó su profunda pasión por el básquetbol, deporte que incluso practicó a nivel de selecciones juveniles en su país, y que casi lo aleja del fútbol, privando a Liga de Quito de uno de los momentos más gloriosos de su historia.

En una charla amena y llena de anécdotas, Fossati sorprendió al público al revelar: "A mí me apasiona el básquetbol, me apasionaba jugarlo, en aquel momento era alto, la altura de los jugadores de básquetbol ha crecido. Jugaba bastante bien para la época, fui seleccionado en mi país, de juveniles, a los 17 años me hicieron mi primer contrato en el fútbol y ahí tuve que dejar el básquetbol".

Esta confesión revela un camino diferente que pudo haber tomado la vida de Fossati. Su altura, en aquel entonces, lo perfilaba como un prometedor jugador de básquetbol, llegando incluso a ser seleccionado juvenil en Uruguay. Sin embargo, el destino, o quizás una decisión crucial a los 17 años, lo encaminó hacia el fútbol, deporte en el que construiría una exitosa carrera como entrenador.

El Fútbol se Cruzó en su Camino: Una Decisión que Benefició a Liga de Quito

La decisión de Fossati de inclinarse por el fútbol a los 17 años resultó ser trascendental, no solo para su propia trayectoria, sino también para la historia de Liga de Quito. De no haber sido por ese primer contrato en el fútbol, quizás nunca hubiéramos visto al uruguayo dirigiendo al equipo albo en las gloriosas campañas de 2008 y 2009.

Es imposible no imaginar el "qué hubiera pasado si..." en la historia de Liga de Quito si Fossati se hubiera dedicado al básquetbol. Probablemente, la Copa Libertadores y la Recopa Sudamericana no estarían en las vitrinas del club, y la afición alba no habría vivido esas noches mágicas que quedarán grabadas para siempre en su memoria.

El Legado de Fossati en Liga de Quito: Un Capítulo Imborrable

El paso de Jorge Fossati por Liga de Quito dejó una huella imborrable. Bajo su dirección técnica, el equipo albo alcanzó la gloria continental al conquistar la Copa Libertadores en 2008, venciendo al Fluminense de Brasil en una final histórica. Un año después, en 2009, Liga sumó un nuevo título internacional al ganar la Recopa Sudamericana frente al Internacional de Porto Alegre.

Estos logros catapultaron a Liga de Quito a la élite del fútbol sudamericano y consolidaron a Fossati como uno de los entrenadores más importantes en la historia del club. Su visión táctica, su liderazgo y su capacidad para motivar a los jugadores fueron fundamentales para alcanzar estos éxitos.

Una Pasión Oculta que Enriqueció su Visión del Deporte

La confesión de Fossati sobre su pasión por el básquetbol permite entender mejor su visión integral del deporte. Su experiencia en otra disciplina deportiva seguramente influyó en su formación como entrenador, aportándole una perspectiva más amplia y una comprensión más profunda del rendimiento físico y mental de los atletas.

Quizás, su conocimiento del básquetbol, un deporte que exige agilidad, estrategia y trabajo en equipo, le permitió desarrollar un estilo de dirección técnica efectivo y adaptable a diferentes contextos.

Un Giro del Destino que Celebran los Albos

La historia de Jorge Fossati y su relación con el básquetbol y el fútbol es un claro ejemplo de cómo el destino puede tomar giros inesperados. Afortunadamente para Liga de Quito, Fossati eligió el fútbol, y gracias a esa decisión, el club vivió una de las etapas más gloriosas de su historia.

La afición alba celebra que el básquetbol no haya alejado a Fossati del fútbol, y agradece al destino por haber puesto al uruguayo en el camino de Liga de Quito. Su legado en el club es imborrable, y su confesión sobre su pasión por el básquetbol añade un nuevo matiz a su rica historia.

Más notas relacionadas:

• 

  Recomendado

  Salió de LDU por la puerta de atrás y el título que consiguió Sebastián González en el extranjero

• 

  Recomendado

  El Rey de Copas trascendió fronteras, hinchas de este equipo de la Premier League también apoyan a Liga de Quito