Por David Alomoto
Mientras con Franklin Guerra aún no han pagado la totalidad de su deuda y les costó 3 puntos, ahora Renato Ibarra han llegado a un acuerdo sin necesidad de llegar hasta la FEF de acuerdo a información de La Radio Redonda Quito. El atacante no ha tenido problema en esperar a que le paguen, para evitar que haya alguna otra sanción a los albos.
La Liga Deportiva Universitaria de Quito, uno de los equipos más populares y exitosos del fútbol ecuatoriano, se ha visto envuelta en una polémica que ha sacudido sus cimientos. El club ha sido sancionado con la resta de puntos debido a deudas pendientes con dos de sus exjugadores: Franklin Guerra y Renato Ibarra.
Las deudas de Liga de Quito con Franklin Guerra y Renato Ibarra se remontan a sus respectivas etapas como jugadores del equipo universitario. Al finalizar sus contratos, ambos futbolistas iniciaron procesos legales para reclamar los valores adeudados por concepto de salarios y otros beneficios.
A pesar de las gestiones realizadas por el club para llegar a un acuerdo, la situación no se resolvió de manera satisfactoria, lo que llevó a que los jugadores presentaran sus demandas ante las instancias correspondientes.
Ante la persistencia de las deudas, la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) decidió intervenir en el caso. Tras analizar las pruebas presentadas por los jugadores y considerando las normas establecidas en el reglamento, la FEF impuso una sanción a Liga de Quito, restándole puntos en la tabla de posiciones.
Esta decisión generó gran controversia en el ámbito futbolístico ecuatoriano, ya que afectaba directamente las aspiraciones del club en la lucha por el título y la clasificación a torneos internacionales.
La resta de puntos tuvo un impacto significativo en Liga de Quito. El equipo, que se encontraba en la parte alta de la tabla, perdió posiciones y se vio obligado a luchar por recuperar el terreno perdido. Además, la sanción generó una gran incertidumbre en el ambiente del club, afectando tanto a los jugadores como a la hinchada.
La directiva de Liga de Quito intentó apelar la decisión de la FEF, argumentando que había realizado los pagos correspondientes y que la sanción era injusta. Sin embargo, los argumentos del club no fueron suficientes para revertir la decisión de la Federación.
Este caso ha puesto en entredicho la imagen de Liga de Quito como una institución seria y responsable. La deuda con los exjugadores ha generado una percepción negativa del club, tanto a nivel nacional como internacional.
Además, la sanción impuesta por la FEF ha puesto en evidencia la importancia de cumplir con las obligaciones económicas en el fútbol profesional.
Este episodio sirve como una lección para todos los clubes del fútbol ecuatoriano. La importancia de cumplir con los compromisos económicos y de mantener una relación transparente con los jugadores es fundamental para garantizar la estabilidad y el buen funcionamiento de las instituciones.
La sanción impuesta a Liga de Quito debe servir como un llamado de atención para que los clubes prioricen el pago de sus deudas y eviten situaciones similares en el futuro.
A pesar de este revés, Liga de Quito debe seguir trabajando para superar esta situación y recuperar la confianza de sus hinchas. El club debe fortalecer su estructura financiera y administrativa para evitar que se repitan situaciones similares en el futuro.
Además, es importante que Liga de Quito se enfoque en lo deportivo y en la construcción de un equipo competitivo que pueda volver a luchar por los primeros lugares.
22/11/2024
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